Sabes que te voy a llenar la boca de heces a punto. Pero primero lámalo mi anus. ¡Ahí va, ya sale la heces de mí. ¡Venga, lámalo, sí… No pude resistir defecar mis heces sucias, memorizaste la boca de tu inodoro. ¡Venga, ingiera sin masticar la heces, está tan suave!