Tu lugar está bajo mi culo baño. Allí tendrás que mentir en este blanco inodoro y sumisamente esperar tu suerte, mi heces. No te confieses, no seré cortés contigo, te alimentaré con todo mi heces. Aquí está, salsicha jugosa y gruesa de heces. Abre la boca y mamea, déjame ver cómo te alimentas ahora en adelante. Y para el dessert, mi diarrea fragrantísima, sólo abre la garganta, deja que fluya libremente en ti. ¡Tú eres mi inodoro ahora!