No recuerdo cuánto tiempo he estado reteniendo esta mierda. Todo lo que sé es que ya no puedo pensar con claridad. ¡Esta mierda tiene que salirme ahora! A pesar de mi urgencia, no puedo evitar provocarte un poco. Mis bragas ya están arruinadas por intentar contener este monstruo, así que puedo ensuciarlas aún más. Dejo escapar un poco de mi turbia caca en las bragas y las unto alrededor de mi ano, describiéndote cómo se siente en mis dedos. Tu boca comenzará a aguarse al ver estas bragas.
Finalmente, es hora de soltar esta enorme carga. Me arrodillo de rodillas y gimo mientras la primera gruesa caca emerge. Continúo soltando grandes y jugosas cacas, orinando todo el tiempo. El golpe final es el último pop de caca, dejando mi lindo ano abierto lo suficiente como para que metas tu pene y folles mi culo sucio.