Dos dominatrix amigas, Miss Yara y Miss Medea, entran en la habitación con vigas de madera rusticas. Están vestidas de latex negra. Al centro de la habitación hay una cama de metal sobre la que un esclavo envuelto en papel aluminio está desnudo y defenso.
Miss Yara presenta a este esclavo. Se llama Cosmo. Ha tenido sus primeras experiencias como inodoro con ella. Puede comer las heces conocidas de ella. Sin embargo, nunca ha visto las heces de una segunda amo.
La misión queda clara. El entrenamiento y el vestir del inodoro deben avanzar. Las dos damas parecen, a pesar de conocerse solo durante un corto tiempo, como un equipo ensayado.
Después de alguna lengüeta de los orificios anales, que está supuestamente para hacer que el esclavo quede horny para la tarea siguiente, se ponen a trabajar. Miss Medea coloca su cuerpo delicado con el espléndido culo directamente encima de la abertura redonda de la máscara del esclavo. Luego de presionar, sale una salchicha de heces en la boca de Cosmo.
Cosmo se entrena paso a paso. El comportamiento deseable se recompensa, el comportamiento indeseado se castiga. Miss Yara despoja su pene una vez que las damas están satisfeas con el comportamiento.
Luego sigue. Miss Yara también se pone. La segunda carga de heces se le pasa a través de la abertura en la boca. El ano de la damas se hace aún más sucio con alguna heces. Sentándose directamente sobre la boca del esclavo, Miss Yara. Cuando Cosmo ingiere las heces se llega a sus límites. Tiene que atragantarse. Sin embargo, Miss Yara lo conoce bien lo suficiente para evitar el desastre. Sin más ado se sienta sobre el esnorranquero y atragantado que atraganta aire. Está impresionada por su sufrimiento y más preocupada por colocarse de nuevo en el marco de las cámaras. Bajo su vigilancia, el esclavo logra pensar mejor y continúa ingiriendo. Cosmo es finalmente perdonado por Miss Medea, mientras que Miss Yara sigue sentada sobre su cara.
Un entrenamiento de vestir de primera clase thus termina exitosamente. Un clásico entre los videos escat. Un debe de cabalgar para todos los principiantes.