Saque mis botas y huele mis nylons podridos–que ahora tienen soles descoloridos por la sudoración copiosa de mis pies! Le digo perdedor que huele mi pie y le pregunto si sería una persona normal, sería pongüelo ponga? Pero para él es divino, y se levanta una erección de perdedor chasquido haha. Adoro a los esclavos de pie–son tan fáciles de manipular. Hago que perdedor mantenga una postura incomoda porque es más cómodo descansar mis pies sucios en su cara de esta manera–y tengo algunas compras que hacer después de esto, así que le hago darme su billetera y me rubo los pies. Voy a ser de compras navideñas; me recuerdo que sus regalos son almohadillas sucias y lamer zapatos ridículos. Hago que perdedor extraiga su erección y luego le insulto por haberse enganchado en el olor a los pies de mujer y confiesa que mis pies son su dios mientras me besa–y está informado de que mi novio reír de él por estar tan excitado por mis nylons! ¡Pobrecito! Levanta sus tarjetas de crédito y continúa adorando mi pie pamperizado mientras yo retiro su dinero y tarjetas de crédito, recordándole que está pagando por todos los regalos que estoy comprando para mis novias y novio.
Después de todo el humillación, hago que perdedor se acerque a la orgasmo–pero lo detengo cada vez antes de que llegue! Luego me arrodillo delante de él para salivarle varias veces en la cara haha!