Esta joven tiene una fetichista por beber su propina orina y claro está que aprovecho a fondo. Una vez, nos reunimos en un pasillo de incendios para que yo me recumpla y tome su vagina en la boca. Después, ella saca un vaso y lo llena de su orina oscura amarilla. Le ofrece a inspeccionar, luego me devuelve para que ella pueda tomar un vaso. Toma un sip y dice que tiene que comer más limpio para producir orina de mejor sabor. Yo la refillé con mi orina también y ella la ama!