¿Has conocido a mi máquina de follarte? ¡Ah, no! Entonces es hora de que se familiarices contigo y de una manera muy intimista. Te colocaré en mi silla de follarte y te fijaré en lugar. No podrás levantarte ni escapar de alguna manera. Llevaré a la máquina de follarte a tu anus y luego estarás siendo violado. Sin piedad, un golpe sigue otro. La máquina de follarte no detiene de follarte a menos que yo la apague. Ella no se debilita, no tiene sentimientos. Sólo seguirá follando a ti y tú me jerarquearás a ella!