Mis botas rojas son sexy, no lo están de más? Pero no están limpias lo suficiente y por eso ahora tú las lamerás. ¡Venga, dame la lengua y lame! Solo presiono mis botas sobre tu boca y luego harás lo que te digo. ¿Cómo te queda abajo allí? Recuerda este lugar, porque será tu lugar por siempre – bajo mis botas!