!!! INSANE, EXTREMO, DEGRADANTE CLIP!!!
Cuando se trata de un inodoro, como tal, no distingue entre sexo, género o raza. Y aquí está la prueba. Este esclavo besará mis heces, sucionará un pene, comerá mis grandes heces y las de mi compañero, beberá mi orina y si hubiera semen lo hubiese ingerido también. Un auténtico latrín humano que acepta lo que se le ofrece. Sin opción, solo recibe y ingiere. Finalmente, su orgasmo será copioso y temblará como una sissy. Sabía que estaba afortunado de haber servido a mi diosa en latex.