Hoy este día en el trabajo va a terminar … Pero antes de abandonar a mis empleados, quiero disfrutar un poco más de esta situación de supremacia femenina. De hecho, bajo mi dirección, mi secretaria primero tuvo sus zapatos limpiados por su colega y luego le pisó, así que tomó su revancha de todas las humillaciones que ese machista chauvinista le había causado. Ahora es el turno de su feo rostro! Sentada en el escritorio, lanza la primera palma. Claro que soy la jefa. Luego actúa Maya. Mis golpes son fuertes, los de mi secretaria son los más débiles. Aún no ha entrado en el estado de ánimo correcto, pero disfruta mucho y esto me gusta porque significa que la mujer solo puede mejorar! Y luego tiene manos más grandes que las mías! Continuamos castigando a Tappy bajo una lluvia de golpes, humillándolo. Hasta que me canso de tenerlo a los pies y le empuje, ordeno que se retire pasando debajo del escritorio, mientras Maya disfruta…