Este noche pasaré en una habitación de hotel con mi esclavo. Si cree que descansará, está equivocado! Tengo algunas emails que responder y él será mi doormat. Sento mi silla y ordeno que se postre a mis pies. Verifico inicialmente que hace un buen trabajo. Después de estar cansada de llevar zapatos, los quito y pongo mis piezas calzadas encima de su cara. Utilizo a conveniencia. De repente, mirando mi teléfono móvil, tengo la genial idea de tomar una foto de él y enviarla a amigas. Y así, el disparo: mis pies sobre la cara de ese perdedor que está en el suelo! Llamo a ellas para escuchar lo que piensan y todos tenemos una gran risa…