Estoy sentada en el sofa y tengo un libro en mis manos. Decidí leer un poco antes de dormir pero… Estoy faltando de algo… Claro, estoy faltando de un apoyo para mis pies! Así que llamo a mi matapollos y le hago sentar bajo mí. Le digo que quiero leer y por supuesto no debe molestarme, pero simplemente debe ser mi silla de pies. Así comienzo a leer, colocando mis Stuart Weitzman boots encima de su cabeza. Ignoro totalmente a él hasta que ordeno que se quiten mis botas. Ahora estoy mucho más cómoda usando solo mis pantyhose gris. Mi matapollos no respira, solo sufre. Cuando los yawns se vuelven frecuentes y entiendo que es hora de ir a dormir, lo desalojo.