Yo y un amigo mío nos encontramos de lado del camas y vemos a este tonto esclavo descansar. Pero ésta es nuestra cama, ¿qué hace que tome nuestro lugar? Ahora pagará caro! Despertamos a él y no le damos tiempo de entender lo que sucede, ya estamos encima de él. Lo aplastamos, hundimos nuestros pies en él y él hunde en la cama. Reprochamoslo, pero al mismo tiempo estamos felices de que hizo esto porquería, pues despertó en nosotros el deseo de castigarlo. Además, empezamos a saltar encima de él y el esclavo y la cama ya no se distinguen. Antes de hacer algún daño a nuestra cama, nos desplazamos y el pisoteo continúa en los paralelepípedos. Cuerpo y cara tendrán ninguna descanso bajo nuestros pies. Y a partir de hoy, aprenderá que nosotros decidimos su lugar.