Hoy te presento a mi nueva esclava, una mujer pequeña y delicada. Hay una gran diferencia en tamaño entre mí y ella, casi no llega hasta la altura de mis senos, y cada parte de su cuerpo es tan pequeña comparada con mía: manos, piernas, cintura, senos… Ella se siente un poco atónita, adora servirme timidamente, pero estoy segura de que juntas veremos algunas buenas cosas, no puedo esperar a divertirme suminiendo a esta nueva recluta!