Bien, ¿qué haremos de este perdedor ahora? Estándole aquí en la Escuela de Dolor, supongo que significa una dura falcate en el trasero! Le va a tocar a él cien golpes. No podrá sentarse durante los próximos días, pero pensará en mí siempre. No soy misericordiosa – tal vez se desmaye y tendré que hacer que comience de nuevo!