En esta ocasión, es hora de comer y la mujer saca a su esclavo de su jaula para alimentarlo. Sin embargo, lo que mete dentro de su platillo no es comida real, sino que ella se deja caer allí mismo! Cuando termina, se coloca encima de él y le hace lamer su anus limpio! Una vez que se siente satisfecha, le ordena sumergirse en su comida! El esclavo, no deseando enfadar a la dominatrix, se sumerge con su cara en su bol con heces! Sin embargo, pronto descubre que no está comiendo y ella lo deja en posición de espalda y le vierte el contenido de su bolsa de heces dentro de su boca! Dejándole sin otra opción que comerlo!