Ese grupo de solteronas tristes guardan un secreto: comparten una fetichista por jóvenes hombres como esclavos. En cada reunión mensual, solicitan a la agencia que envíe a un joven fresco a sus cuarteles generales. Hacen que se desnude hasta sus calzas y les preguntan cosas intimas, como su experiencia sexual y el tamaño de su penis. Después de alguna charla, las hermosas damas lo encadenan al suelo, haciéndolo indefenso y sumiso. Se turnan para pisotear su cuerpo joven, preparándolo para más acción kinky más tarde.