El uso de electricidad me permite ********** el pene del esclavo del inodoro (lo que ya no necesita) y mantener mis manos libres de tocarle el cretino desagradable aún menos que sea necesario. Poder entregar una descarga eléctrica al pene en cualquier momento me permite ser juguetón y descansado mientras escucho la música de las gritos subhumanos. Sus gritos y mi reír son hermosas música. Aún mientras arpía en el suelo, su pene se endurece. Está atrapado por mi belleza y su perversión. Incluso le permito lamer mi perfecta vagina mientras mi anus se infla y se vuelve más y más grande. Finalmente mi heces salen lentamente y gruesamente y se depositan perfectamente redondeadas en la cara del esclavo del inodoro. Pongo y patalo sus huevos para que come. Luego comienzo a masturbar el pene del esclavo con mi pie y luego con mi mano, todo mientras golpeo sus cojones y le ordeno comer. El esclavo experimenta el sabor de las heces, el dolor de la paliza en los cojones, el placer de la masturbación en el mismo momento, condicionándolo para sexualizar el dolor y la humillación. Nunca va a tener sexo normal de nuevo.