Acúrate detrás mío, saca el feces de mi ano con tus manos y metelo en tu boca. Más, más, saca el feces, comé mis chocolates. Engorde tus mejillas para que se asemejen a las de una ratoncilla. ¡Qué bueno!, no he tenido tan poca heces en un rato. Comé mi feces, mi comensal de feces, comé más, lámalos los dedos. ¡Soy tu favorito comensal de feces, masticar, comer! Después de todo, la verdad es sabrosa, tengo heces. Chupa la heces por encima de tu cara, pecho. ¡Qué hermosa eres ahora! Buena esclava, comé mi heces, acostúmbrate a comer heces, eres mi inodoro. ¡Un poco enfermizo pero nada, ¡vuelva a ingerirlo! ¡Quiero tanto! ¡Veo cómo estás feliz de comer mis heces!