Algunas se bautizan en nombre de su Señor, es una cosa única. En el mundo femenino de Zephianna, el bautismo es regular para la verdadera devoción. Deja tu alma en mis pies divinos y recibe mis aguas santas de oro por encima de tu cara, miserable una. Ahora gracias a tu diosa femenina, y muestra más aprecio lamiendo cualquier resto de mis zapatos y también el suelo.