3 mujeres me alimentaron poderosamente con sus heces y orina. Era fantásticamente cool – Cristina, Jana y Amina (Amina tomó una laxativa, porque temía que hubiera constipación – lo sabía antes de la sesión) me utilizaron a turnas. La primera fue Yana, ella siempre tenía heces líquidas, pero había mucho de ellas – estaba bien preparada! La segunda fue Cristina, su heces eran menos líquidas y más fuerte al gusto, era más difícil de ingerir. Como siempre, Cristina me urgió duro, haciéndome ingerir a prhasas más rápido, y al final bebí una gran porción de mi hermosa orina. Amina se fue a la tercera habitación – su heces eran las más frescas – líquidas, diarrea naranja – la vi por primera vez, en ese momento era difícil para mí, pero pude. Así, Amina me dio una gran dosis de orina.
El olor casi no me llegaba, pero los sabores de las mujeres eran muy, muy diferentes, si tenía los ojos cerrados, las reconocería fácilmente a la sabor de sus heces. Era increíble sentir tantos sabores diferentes y saber que debía ingerirlos todo para que las mujeres estuvieran satisfechas. Es cool saber que cada próxima mujer no sabía lo que había estado antes de ella y no se preocupaba – su meta era alimentarme con su heces y salir de esta habitación hueca. Cool y asustador cuando no sabes qué sorpresa tienes preparada la próxima mujer. Al tiempo cuando una de las mujeres estaba en el cuarto, las otras dos estaban en el corredor y se reíeron alegremente y escuchaban música. Antes de la sesión, Amina tomó 3 copas de vodka para relajarse y fumó – estaba preocupada porque era su primera sesión. Las mujeres tuvieron una gran fiesta! Si una cuarta mujer hubiese entrado en el cuarto, hubiese sido increíble, pero no sé si hubiese podido…