Tres jóvenes estudiantes universitarias tienen problemas para pagar las matrículas de esta año. Han estado intentando entrar en trabajos de modelo, pero sin éxito. Han inscrito en diferentes agencias de modelos.
Cuando menos lo esperaban, recibieron una llamada de una de esas agencias. Al parecer, había recibido una orden anónima de un cliente que pedía una cantidad grande de feces, y que ellas serían perfectas para ello, ya que realmente necesitaban el dinero.
Después de vacilar y reírse de la situación, decidieron:
¿Pueden realmente cumplir con esta cantidad de pedido?