A partir de ahora estás contractualmente obligado a pagar por cada orgasmo. ¡Escucha bien, tener un orgasmo deja de ser gratis! Debes pagarlo a partir de ahora. No hay excepciones, si no pagas, entonces no tendrás orgasmo. Es tan simple.
Ahora empezaremos y yo te extraeré con mi máquina de extracción!