Tenía una lesión pequeña que hizo que pusiera mi brazo en un yeso y este tonto se atrevió a burlarse de mí. Pensaba que era inofensiva en estas condiciones y se burlaba de mí, olvidándose de un detalle: mis piernas y pies siguen funcionando muy bien. Y efectivamente seré aún más cruel y castigadora de lo usual, pudiendo solo usar patadas como aprenderán sus cojones. Destruyo sus cojones con todos los tipos de patadas, primero usando zapatillas de ballet, luego solo calzas y luego descalzas, luego rodillas, patadas dobles y patadas voladoras: soy salvaje hasta dejarlo en el suelo en dolor para que refleje y aprenda de su comportamiento insolente.