Hoy, tu perra de baño, tienes el honor de servirme durante el sexo. Lickarás mi ano mientras yo suco el pene de mi marido, observarás cómo él te penetra en el ano, y después de que cumpla, comerás sperma y defecarás de mi ano. ¡Sí, y no olvides lamer su sucio pene desde la hecesa, no podemos dejarlo sucio! Y ahora baja a realizar tus deberes.