Cerniéndose, bebiendo orina y sucionando pene al mismo tiempo es una bendición

¡Ay, quiero cernirme. La tapa en el ano retiene la heces, pero soporto, soporto hasta empezar a sucionar pene. Es una alegría indescriptible cuando entra un miembro en la boca, y la heces sale explosivamente de allí, cae mucho, en abundancia. Llena inmediatamente el cuarto, sumando incluso más excitación, despertando impulsos sexuales en el vagín. Sí, suciona, más suciona, quiero sucionar… hasta que quiera orinar. Orine en mí, en mi boca, quiero sentirlo, realmente quiero. Un flujo salado, dado de vida, golpea directamente en la boca, en la lengua, en la garganta, llena la boca. Intentando mantenerme al día con el flujo, quiero más. ¡Qué me excitas más, me siento completamente pervertida Señora!

Ver Video Completo