Confequé una nueva publicación para mi esclavo marido – peluquero mi púbis. Corta, rectifica el pelusco en mi púbis, cuidadosamente, no pinches ni corta. Hecho bien, toma el peine de pelos de diferentes lados. No cortes mucho, solo afloja. Quiero tener un púbis peludo. Llevaste el trabajo, ahora lámalo, lámalo para que cumpla, desde el fondo con tu lengua. Siento que me voy a dar una diarrea pronto, prepárate, hoy tu boca será mi inodoro. Primero abusa de mí con tu mano y con tu estrapon en el culo para que el culo se abra y te de más feces. Abra tu boca, mame, suaviza las heces. No puedes comer heces de mi anus. Lamer las heces de mi púbis y ingerirlas, ¡insignificante cobarde!