Regresas de tu trabajo. Te sorprendes a mí desnuda en tu sofá, masturbándome. Estoy en plena extasís orgásmico, casi salivando y no puedo detenerme para decirte hola. Esto te excita mucho y empesas a tocarme, agarrando mi culo. Mientras tocas y jugas con mi culo notas con sorpresa que una masiva hecesa está saliendo de mi estrecha y hermosa anus. Por favor, va a la baño ahora! te rogo, pero es demasiado tarde. Estoy demasiado apasionada para detenerme y la masiva y dura vara que sale de mi anus es un gran contribuyente a mi apasion. Parte de ti sabes que no podré detenerme hasta que no cumpla, pero aún con tu último pedazo de esperanza te rogas que vaya a la baño. Orgasmarás antes de que el poop se libere en tu hermoso nuevo sofá. Sabes que verte masturbarte siempre me hace cumplir rápidamente, así que empesas a masturbarte también. Secretamente la escena te está volviendo increíblemente atraer y esto es una gran excusa para masturbarte duro a ella. Yo suspiro, me desmalo y respiro con pleno gozo orgásmico y tú te sientes seguro de que voy a cumplir antes que heces. Sin embargo, lo contrario sucede, mientras rubo mi vagina duro mi anus se abre amplio para un MASIVO cargamento de heces gruesas. Sabes que es demasiado tarde ahora y te fijas en mí mientras el increíblemente masivo y largo cepillo suelo sale. De verdad te encuentras irresistible. Abro mis piernas seductoramente para ti, invitándote a venir a lamerme y a hacerme, al lado del masivo cepillo en tu sofá. Hebo para enriquecer tu hogar aún más. ¡Tú eres tan atraído por mí! ¡Decides simplemente ir conmigo hacia este hueco orgásmico y fetichista lleno de heces!